Fue en el 2020 que Ingrid Parra dio a conocer una realidad de muchas mujeres que sueñan con ser madres, pero que no logran quedan embarazadas. Sin embargo, la vida le trajo una de las sorpresas más lindas de la vida, la misma que hoy tiene el nombre de Emma y se ha transformado en su mejor compañera.
La dulce espera de la comediante estuvo, dentro de muchas cosas, marcada por el goce y la liberad de disfrutar cada trimestre, por lo que subió 18 kilos que, tras el parto, comenzó a bajar lentamente. “La verdad que me costó ene bajar de peso hasta que llegué a Equilibrio Vital de la Clínica Terré, porque cuando eres mamá la ansiedad y el poco tiempo para comer te mata”, señala Ingrid, quien agregó que mayor motivación era sentirse bien consigo misma.
“Es obvio que cuando uno es mamá el cuerpo cambia y no tengo rollo con eso, pese a que no faltó quien me hizo algún comentario desubicado, porque hay personas que todavía no entienden que no se debe hablar del cuerpo de otro. Pero mi tema es que yo no me sentía bien y creo que la maternidad no puede frenarnos como mujeres, no puede hacer que nos olvidemos de nosotras mismas y nos dejemos estar. Una tiene que darse esos espacios”, comenta Parra. Lo que señala la actriz le ocurre a muchas mujeres que sienten que su rostro no tiene el mismo brillo y que la falta de sueño queda en evidencia con las ojeras. “La verdad es que cada vez son más las mamás que vienen en búsqueda de tratamientos que puedan realizarse con la lactancia y que les ayude a sentirse mejor”, cuenta la doctora Melissa Arroyave , Jefa del área de Estética de Clínica Terré.
“Yo creo que durante harto tiempo a las mujeres se nos cuestionaba por preocuparnos y ocuparnos de nosotras cuando los hijos con chicos, eras como “mala mamá” y yo creo que nos hace buenas mamás, porque estando bien con nosotras como mujeres vamos estar bien para ellos. Yo de hecho no tengo tema en contar que me hecho cuanta cosa he podido: Vitaminas, un tratamiento de Xela Rederm para el color de las ojeras y hasta una lipolocalizada”, cuenta la Peka Parra, quien dice sentirse mucho más cómoda para enfrentar nuevos proyectos.